Todas mis ex aportaron algo positivo a mi vida. La última: El recuerdo de sus ojitos y la enseñanza de lo inocente y puro que puede ser el amor. La anterior: Me enseñó que no hay que estar cerca para tocar el alma de quien amas. La anterior: Me enseñó que si me lo propongo soy capaz de conseguir lo que sea. La anterior: Me enseñó a que no debo confiar en todo el mundo. La anterior: Una bonita medusa cristalizada y la prueba de que con amor se puede curar todo. La anterior: Recuerdos de apoyo incondicional. La anterior: Me enseñó a cuidar de mi salud. Y la primera: Los abrazos más lindos y cálidos de mi vida.