💔 Me despedía de todo y no me daba cuenta que la historia estaría conmigo pese a este final ... 💔
Abracé la noche como a una vieja amiga y me sumergí en el silencio de las calles. La humedad congelando mis huesos bajo el abrigo, apenas distraía mis pensamientos anclados en la puerta. No había nadie. Quizá también tomó sus propias decisiones. Quizá lea mi carta. Ya nada importa. Prosigo mis pasos en silencio mientras la ciudad calla, calla y se ahoga con esta maldita humedad que acongoja mi garganta. Veo pasar un coche por la general, cortando con maestría rutinaria un eco adoquinado que persiste cuando se marcha. Llegué. Dejo mi sombrero en la barandilla, ya no llueve. Bajo las escaleras hacia el subterráneo, y apuro el paso, pronto amanecerá.