You can't wake up, This is not a dream. You're part of a machine, you're not a human being. With your face all made up, living on a screen. Low on self esteem, so you run on gasoline.
Y volvió. Volvió mi gran amiga, mi gran pesadilla. Esa chica que me recordaba cada día lo insignificante que soy y lo divertido que sería su compañía. Y diréis ¿Cómo pudiste llamar alguna vez amiga a ese monstruo que te está destrozando, te está matando? Sinceramente, no lo sé. Ella vino de repente adentrándose en mis más profundos pensamientos sin antes preguntar si yo quería meterme en eso a lo que ni si quiera puedo nombrar como "vida". Nadie era capaz de comprenderme hasta que apareció Deb. Me dijo que dejaría de sufrir, que me haría sentir mejor. Ya no estaría sola, ella y todas sus amigas harían que no me sintiese tan sola. No sería una maldita vaca menospreciada hasta por su propia madre. Me harían sentir frágil, ingrávida y sobre todo, bonita.Me hizo comprender las distintas formas de poder llenar el lienzo con ese líquido burdeos gracias a esos pinceles tan afilados que me ofreció. Y ahí es cuando firmé su engañoso contrato. Eso sí, ella me liberó del dolor que me condenaba la soledad a condición de no separarme de ella, era de su pertenencia, mi vida era de su pertenencia y eso no iba a cambiar hasta que mi mortalidad hiciera honor a su nombre. Lo vi un buen trato, total no tenía nada que perder, hasta que me di cuenta. Yo ya estaba muerta cuando acepté.
Veinte pavos y me la saco. Si no, los besos son solo para nosotros dos. Ahora una cosa seria. ¿Tanto interés por mí a qué viene? ¿Me queréis o me queréis muerto? —El limón