No te imaginas las ganas que tengo de escribirte. De explicarte las cosas. De que se me imposibilita olvidarte. Espero en algún momento de la vida. Tenga oportunidad de verte.
Si. Soy un poco egoísta. Debo escribirte. Quizás también tengo temor al rechazo. Creo que de tu parte eso obtendre. No te olvido mi niña. Esa ilusión nadie me la quita.
Esa forma de escribir la conozco de aquí a dominicana, haces bien en no escribirme y te agradecería que me llamaras por mi nombre... No soy tu niña.