Iván Sáez tenía 12 años, iba a hacer 13. Su voz era única, tenía un lunar encima del labio y llevaba una dilatación pequeña con un pendiente rojo. Solía decir "Vaaaaamoos ahii" y "tolas, que eres un tolas". Cuando se enfadaba te empezaba a gritar cada vez más alto cuando él siempre tenía que estar por encima. Era bastante majo y muy buen chico y con un corazón tan grande que no le cabe en el pecho. Todo lo que quería lo conseguía.
Tu recuerdo en mi alma. Se nos fue aquel final feliz. No se han ido las ganas de verte, no se acaban las horas sin ti, no se van los días que te vi. Solo faltas tú, tu infinita sonrísa. (Te hecho mucho de menos pequeño❤)