Actualmente, gorrino.
Si, puede que si. Después de todo, una cosa es que no comparta eso contigo y otra distinta es que te tache de no estar bien por ello. Incluso en el primer caso, que sepas que no va a cambiar, será algo que no puedas volver a disfrutar o explorar.
Mucho más simple que eso, porque no hay siguiente paso, el destino no existe y el sentido común dicta que lo mejor es seguir tu camino.
Lo hablaría con mi hijo, sin saber sus preferencias no voy a especular. Parecerá una tontería, pero forzarle a llevar algo que no le gusta va a dar lugar a engaños y tampoco lo voy a mandar al colegio con bollería industrial.
¿Hoy? Que la casa se limpiase sola.
Pero lee el nombre al menos.
Nunca digas nunca, no se sabe a lo que te puede llevar una situación extrema.
Muchas cosas, si lo entendiese todo sería omnisciente, mi curiosidad moriría y con ella, yo.
No es cuestión de ser capaz o no, es que las neuronas me hacen la suficiente reacción para entender que es una tremenda estupidez. Si alguien te va a ser infiel o te va a dejar no va a ser por tu aspecto físico (nadie que haya madurado, claro, en otro caso ponle un puente de plata y dale las gracias por irse).