10. Espacio libre.
Me gustaba pensar en ti en tiempo presente. Sin preocuparme de dónde venimos y cómo es que fuimos a terminar juntos, y sin preocuparme nunca por cómo es que todo iba a terminar.
Claro que desde un principio supe que habría un final y nunca quise convencerme de lo contrario, porque nada iba a cambiar el hecho de que dolería un montón y que lloraría mares, así que trataba de estar presente en cada momento. Y no me refiero a sólo ir y aplastar mi trasero en el sofá contigo, hablo de que estaba presente, en cuerpo y alma, disfrutando de cualquier cosa que hiciéramos juntos, por más pequeña que fuera, para días como hoy, en los que el cielo se torna gris y me echo a llover mientras recuerdo cada detalle.
Claro que desde un principio supe que habría un final y nunca quise convencerme de lo contrario, porque nada iba a cambiar el hecho de que dolería un montón y que lloraría mares, así que trataba de estar presente en cada momento. Y no me refiero a sólo ir y aplastar mi trasero en el sofá contigo, hablo de que estaba presente, en cuerpo y alma, disfrutando de cualquier cosa que hiciéramos juntos, por más pequeña que fuera, para días como hoy, en los que el cielo se torna gris y me echo a llover mientras recuerdo cada detalle.