http://www.youtube.com/watch?v=5anLPw0Efmo

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Estas acorralado, sin salida, perdido en un inmenso laberinto llamado memoria.
Te sientes muy nervioso, agobiado, presionado, infeliz.
Ese gran laberinto te esta intentando decir algo, te manda señales.
Pero tu no las entiendes, o no las quieres entender.
Entonces al ver tu actitud indiferente pasa al siguiente nivel.
Ahora aparecen espejos de la nada, como por arte de magia.
En ellos empiezan a aparecer imágenes, escenas que conoces perfectamente.
Esos "mágicos" espejos están enseñándote tus recuerdos.
Cada vez te pones más nervioso, te estresas y ligeramente te enfadas.
Cada vez hay más imágenes, cada vez más recuerdos, cada vez todo se vuelve más irreal.
Estas siendo obligado a recordar.
Si, a recordar, ese supuestamente emotivo y precioso acto.
Pero tu no quieres recordar, no deseas por nada en el mundo revivir mentalmente esos momentos.
Entonces decides huir, como un energúmeno concentras toda tu rabia en un objetivo, destrozar los espejos y escapar del laberinto.
Es imposible.
Te están obligando a recordar.
Entonces derrotado y frustado por no conseguir resultados decides rendirte.
Te sientas y te intentas relajar.
Poco a poco mientras respiras profundamente.
Es entonces cuando una especie de aroma inunda el ambiente.
Un aroma dulce, afrutado.
No entiendes nada pero cada vez te sientes mejor.
Estas en un estado de paz absoluta, has llegado al nirvana.
Entonces los espejos se deshacen, se esfuman, y las imágenes que se reflejaban ahora están por el suelo en miles de fotografías.
Vas cogiendo las fotos una a una, al mismo tiempo que sonríes recuerdas.
Felicidades, has conseguido superarte, has logrado una meta personal, has abierto la mente y has dejado que miles de momentos con personas que ya no están revivan.
Entonces todo se ilumina y el laberinto desaparece.
Te sientes mejor que nunca.