En medio de la guerra, un chaval pelirrojo y sus amigos destruyeron los últimos restos de la raza de Eve y acabaron con la vida del Rey nasod.
Otra vez, Eve estaba perdida y sola en su presente resultando sus esfuerzos inútiles, pero no todo estaba perdido, ella perseveró y decidió recuperar el poder del Eldrit y esperar a revivir su raza de nuevo.
Ella decidió seguir al pelirrojo y sus amigos para encontrar el Cristal de Eldrit y revivir su raza. Era, después de todo, el primer chico que le decía que quería ser su amigo
Con el pasar del tiempo y con cada batalla que luchaba con el grupo, se dió cuenta de que no estaba hecha para luchar, a pesar de tener a Moby y Remy, sus queridos Drones, estos también tenían límites, por lo que comenzó a fabricar un Nasod como lo había hecho su antiguo Rey, creando a Oberon, un guerrero dispuesto a dar su vida por su Reina, al igual que ella, le instaló un circuito de Emociones interno, por lo que Oberon podía interactuar con los humanos y ayudarlos igualmente por voluntad propia.
Aún así, Oberon también tenía Limites y toda la carga pesada llegaba a él, Por lo que Eve decidió crear dos asistentes más, Ophelia, una sirvienta la cual iba a asistir a Oberon en combate, y Ferdinand, quién iba a ayudarlos cuando todo estuviese perdido.
Ya tenía un pequeño reinado con los Nasod que fabricó y en un punto de la aventura, llegaron a Elysion, una ciudadela creada por Adrian una generación después de Eve, era una ciudad solo echa para Nasods.
Eve aprendió de las cosas que los Nasod hicieron para que su reino se mantuviera por tanto tiempo, Eve estaba emocionada por crear un nuevo reino… pero un Reino solo de Nasods, no era lo que Eve buscaba.
Eve ahora tenía amigos y quería que los Nasod y los demás pudieran convivir en paz y armonía, era un sueño, un deseo que Eve hará lo que sea por cumplir, después de todo, no está sola en esto.
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