• Recuerda
Era en día exactamente igual a éste, la temperatura había bajado mucho, afuera llovía y desde mi ventana podía ver como algunas personas se mojaban y maldecían al aire. Él dormía plácidamente en mi cama y se tapaba hasta la cabeza con el edredón blanco que cubría el resto de su cuerpo, para muchos eso podría ser algo común pero para mi era algo hermoso, opté por volver a acostarme y rodear su delgado cuerpo con mis brazos; quise que el tiempo se congelara justo ahí, pero fue imposible.