Uufff. A ver... es que el acuario con polaridad femenina/yin es muy... extraño. Sigue conservando la franqueza y buena fe del acuario guerrero, pero es más egoísta que la media. Eso. La mujer acuariana es egoísta porque está tan enamorada de sus pasiones y quiere tanto la paz —o el caos— mundial, que se olvida que no todos pueden seguirle el ritmo. Ella es desconfiada, todo lo que esconde con esa coraza de seguridad y coquetería no es más que un lado de gelatina que tiembla cuando nota que alguien sabe cuál es su verdadero ser. Anhela ser amada, entendida, mimada... y cáncer puede darle todo eso. Pero sin las luces y los viajes estelares que acuario tanto goza. Quizás con algo de drogas... Pero no. Cáncer es fantasioso, pero dentro de su pequeño nido de amor. ¿Para qué ir a recorrer Vietnam si puedes traer los mejores platillos a casa? Eso es lo que piensa el sosegado hombre canceriano, mientras una inquieta acuario se trepa por las paredes buscando de qué cable conectarse para hacer cortocircuito con sus neuronas. Ambos son pensadores insomnes, son sexuales, son pícaros... pero acuario desde el matiz mental, y cáncer desde el corazón. Cáncer puede sacar el lado inocente de acuario cada que quiere, siempre tiene algo que enseñarle y eso a ella le fascina. Y acuario, por su parte, siempre puede mejorar las formas en las que cáncer hace las cosas. Siempre tiene un método poco ortodoxo y no por eso menos aplicable, todo lo contrario.

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Cáncer le da estabilidad y seguridad, pero asfixia. Acuario quiere sentirse en familia, pero su familia está conformada por ella, él, la abuela, el vecino, el vecino del primo, el primo del cuñado, el ex novio... ¡si tan solo pudieran vivir todos juntos! Y eso a cáncer, no. No le cuadra. Su núcleo debe ser chiquito y conocido. Si acaso unos doce perros y seis niños. Y es que eso sí, acuario y cáncer son una de las combinaciones más dadas a procrear; la mujer acuario suele ser extremista y tener muchos hijos, o uno solo-ninguno. Y cáncer, que está regido por la madre luna, estará encantado de tener su arsenal de criaturitas en pañales que consentir y darle besos antes de dormir.

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Se complementan, pero necesitan trabajar en sus tiempos y aprender a respetarse. Acuario es ofensiva hasta decir basta, y cáncer es autoritario. Ambos tienen la misión de aceptarse e impulsarse mutuamente a la mejoría.