A pocas personas quiero de verdad, y de aún menos guardo buena opinión. Mientras más conozco el mundo, más insatisfecha estoy con él; y cada día se va confirmando mi creencia en la inconsistencia humana y la ínfima confianza que puede ser depositada en las apariencias de bondad o inteligencia.
Monte-Carlo, Mónaco.
—Orgullo y prejuicio, Jane Austen.