@TodoLoqueEresParaMi

I love you, deep in my bones

Ask @TodoLoqueEresParaMi

Sort by:

LatestTop

Related users

Quiero quererte hasta el último aliento de todas las vidas que quiero crear y compartir contigo.

⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀« Quédate con quien te espere,
⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀ aunque sepa que vas a llegar tarde. »
⠀⠀
Esta cita ha conseguido trasladarme a una de las épocas más inestables que hemos podido experimentar a lo largo de todos estos años, cuando el miedo a sentir nos paralizó.
⠀⠀
Semanas en las que nuestra rutina se redujo en encadenar tropiezo tras tropiezo, ocasionando la devastadora y dolorosa separación de nuestros caminos.
Obligándonos a actuar como unos completos desconocidos…
Forzándonos a interpretar el papel de nuestras vidas,
silenciando los recuerdos compartidos.
Ocultando la gravedad de las heridas que atormentaban
nuestros corazones.
⠀⠀
Fueron meses en los que el tiempo se me pasó…
esperándote. Esperándote volver.
⠀⠀
Donde nos recordé con la desgarradora nostalgia de aquel que hubiese deseado detener el transcurso del tiempo,
antes de que el naufragio aconteciese.
Donde nos soñé despierto, en cualquier hora y lugar, sin alcanzar siquiera a imaginar que cinco años después, aquel verano de 2017 se convertiría en el único punto y aparte de nuestra historia.
⠀⠀
Porque como aseguran, el amor verdadero espera.
Y yo a ti juro que te esperaría en todas y cada una de mis vidas.

View more

Quiero quererte hasta el último aliento de todas las vidas que quiero crear y

A escasas jornadas de celebrar el quinto aniversario de la que fuese nuestra primera conversación, no puedo evitar reflexionar acerca de lo agradecido que me siento por tenerte y de cómo ese pensamiento, sempiterno e inalterable, me ha acompañado a lo largo de cada uno de los días desde que llegaste a mi vida aquel dichoso 6 de abril de 2017.
⠀⠀
⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀Conocerte fue el origen de mi existencia.
⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀Amarte, mi razón de ser.
⠀⠀
El amor que siento por ti trasciende de esta vida y no se detendrá, ni siquiera, con el último latir de mi corazón.
¿Sabes por qué?
Porque yo te quiero con el alma.
Y el alma, Eleanor, es eterna.
⠀⠀
Permíteme efímeramente retroceder en el tiempo y remóntate conmigo al día de nuestra primera boda.
En concreto, a la promesa que realicé minutos después del prematuro y espontáneo reencuentro que tuvo lugar a medio camino del altar, cuando fui incapaz de aguardar pacientemente tu llegada hasta él.
⠀⠀
Aquel 26 de agosto de 2018 te juré amor eterno.
¿Hoy?
⠀⠀
Hoy te declaro el amor de todas mis vidas.
Hoy prometo que no descansaré,
aun cuando el final me alcance,
hasta volver a encontrarte.
⠀⠀
Porque este amor, inconmensurable y sempiterno,
es más fuerte que la muerte.

Gracias por estos maravillosos años a tu lado, vida mía.

View more

⠀⠀« Esas partes de mí, que solo existen contigo. »

– ¿Te he hecho saber, en alguna ocasión, lo mucho que me gustan estos dos hoyuelos? – Declaró con un tono de voz pausado y cómplice, al mismo tiempo que deslizaba las yemas
de los dedos índice y corazón sobre aquellas características muescas de la dermis femenina, ubicadas en el desenlace de su espalda.
⠀⠀
Incapaz de contener el florecimiento de una nueva y dilatada sonrisa, la veinteañera optó por dejar caer su rostro sobre la superficie de sus antebrazos, escondiéndolo. De ese modo, ocultó también el rubor de sus mejillas mientras alzaba un ápice el rostro para observarle de reojo y susurrar pizpireta: — Eres un zalamero…
⠀⠀
— Hablo en serio… — Aseguró el americano, conforme trasladaba la misma extremidad superior hasta el cuero cabelludo ajeno: espacio sobre el que, a continuación, diseminaría una cascada de lentas y delicadas caricias. Desarrollando un esmerado masaje con el que poder desvanecerse, cariñosamente, entre aquellos tostados mechones.
⠀⠀
Eleanor, finalmente, acabó apoyando silenciosamente el perfil de su rostro sobre la superficie de sus propios antebrazos
-ahora cruzados- para poder condensar toda la atención en el semblante masculino, aunque no tardó en alargar la articulación derecha para recorrer su mandíbula, de extremo a extremo, con el dorso de un par de dedos. Lentamente, con cariño. — A mí me gustan tus ojos…
⠀⠀
El treintañero fue incorporándose, poco a poco, sobre la superficie del colchón. Mermando paulatinamente la distancia física que, hasta aquellos momentos, los había mantenido alejados. Reduciendo el espacio, hasta encontrarse hombro con hombro. — Me haces muy, muy feliz. — Susurró con el filo de los labios descansando sobre el omóplato femenino más cercano a su ubicación, en los instantes previos al nacimiento de un
íntimo y flemático beso sobre el área mencionada.
⠀⠀
Ni pudo, ni quiso desviar la mirada del joven: observándolo en silencio, con esa devoción implícita en cada parpadeo, mientras éste se acomodaba y la colmaba de mimos a posteriori. Inmediatamente después, sintió el imperioso deseo de arrastrar la yema de los dedos bajo su pelo, y así lo hizo. Aunque primero se acomodó bocarriba, cubierta parcialmente por la sábana;
pero sin hacer amago alguno de cubrirse. No hacía falta ante su presencia. Repeinó el cabello alborotado de su pareja, empezando por la zona del flequillo, mientras le miraba a los ojos y pensaba en lo afortunada que era. — Haces que mi corazón rebose de sentimientos, Josh. Felicidad, amor, serenidad, confianza... — Susurró, arrastrando la yema de los dedos sobre su cuero cabelludo.
⠀⠀
⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀(...)

View more

⠀⠀

⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀(...)
⠀⠀
En silencio, el muchacho contempló con atención el cambio de ubicación que se produjo en la anatomía opuesta, acompañando todos y cada uno de sus distinguidos movimientos a través de la mirada. Todavía, hoy en día, continuaba preguntándose si aquella belleza era de ese mundo. — Antes de ti, jamás había reparado en lo mucho que disfruto con este tipo de caricias. — Confesó, apenas con un hilo audible de voz. — Nunca pensé que pudiese necesitarlas tanto. — Continuó diciendo, antes de exteriorizar el grado de relajación que le generaban los dedos ajenos, al recostar parcialmente el semblante sobre la almohada y privarse voluntariamente del sentido de la vista.
⠀⠀
Escuchar la confesión masculina y contemplar a su pareja tan a gusto, cómodo y relajado desencadenó el nacimiento de una pequeña y cómplice sonrisita. No tardó en recoger esos pelos rebeldes en las proximidades de la oreja para repeinárselos en silencio, a medida que ordenaba esa abundancia de sensaciones y pensamientos según le acariciaba el contorno del oído con la yema del dedo índice, siguiendo la forma: trazándola con lentitud, y mimo. — Si he de ser sincera... — Comenzó diciendo. — Nunca había intimado tanto con alguien como para pasar tiempo en la cama, dedicándonos carantoñas, parándonos a hablar del pasado o del futuro, de todo o de nada. Esto solamente lo he experimentado contigo. — Admitió con el volumen de voz apagado, mientras trasladaba la citada yema hacia sus facciones. — Por eso es tan especial...
⠀⠀
Aquella mayúscula sensación de bienestar no se diluyó ni tan siquiera con el traslado de ubicación de las caricias femeninas. — ¿Eso quiere decir… que sumamos a la lista una nueva primera vez? — Consultó, a la par que recuperaba el sentido de la vista y emprendía, paulatina y lateralmente, la aproximación al semblante ajeno en busca de un broche entre bocas.
⠀⠀
— Mm-hm… — Asintió, despacio: remolcando la yema del dedo índice por el entrecejo hasta repasar su nariz por completo. Siguió ese recorrido con la mirada, incluso cuando hubo traspasado el Arco de Cupido y arrastrado parte del labio inferior consigo. La veinteañera se removió un poquito en el colchón, con la única pretensión de aproximarse también a él, mimosa; sin poder parar de acariciar su piel desnuda.

View more

¿Qué clase de rompecabezas eres tú?

« ¿Qué les queda, entonces? No parece que exista ya posibilidad de un punto intermedio. Han pasado demasiadas cosas entre ellos. Entonces, ¿se ha terminado y ya no son nada? ¿Y en qué se traduciría eso, lo de no ser nada para ella? Podría evitarla, pero tan pronto la volviese a ver, aunque cruzaran apenas una mirada a las puertas de una sala de conferencias, esa mirada no podría contener nada. Y no querría jamás que fuera así. Había deseado sinceramente morir, pero nunca había deseado sinceramente que Marianne se olvidase de él. Esa es la única parte de sí mismo que quiere proteger, la parte de él que existe dentro de ella. »

Language: English