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A las puertas de la Iglesia de San Eustaquio (Eglise Saint-Eustache), una maravilla que plantaron en el barrio del Forum de les Halles en Paris, hace la friolera de 500 años.
A las puertas...
Pienso en esa idea, la de estar cerca de algo y no saber qué se esconde detrás. Hay puertas que no atravesamos por miedo, hay otras que parecen cerradas, o eso creemos. A veces algunas las derribamos a patadas, sin pensarlo mucho, con cierta furia. Lo que está claro es que no siempre hay detrás algo que merezca la pena, y es que eso nunca lo sabremos si no lo intentamos. ¿Hay puertas que merece la pena dejarlas cerradas? Tal vez sí.
La vida me parece una aventura extraodinaria, de veras que sí. Que nadie te diga qué debes hacer con tu vida, es tuya. Haz lo que quieras hacer. A lo largo de mi carrera me he encontrado infinidad de puertas cerradas, y algunas que lo han hecho en mi propia cara. No nos tomemos todo a la tremenda. Quién sabe si dentro de unos años un golpe de viento no las abrirá de par en par.
No hay tiempo perdido, ni tiempo que perder.
Gracias a todas aquellas personas que me abren las puertas de su casa y de sus vidas. Se está de lujo ahí dentro.
Aquí les muestro mis filias y mis fobias:
En Spotify: https://open.spotify.com/album/1DM29meUMXVbfo8VqKxAjm
En Tidal:
http://tidal.com/album/50348478
A las puertas...
Pienso en esa idea, la de estar cerca de algo y no saber qué se esconde detrás. Hay puertas que no atravesamos por miedo, hay otras que parecen cerradas, o eso creemos. A veces algunas las derribamos a patadas, sin pensarlo mucho, con cierta furia. Lo que está claro es que no siempre hay detrás algo que merezca la pena, y es que eso nunca lo sabremos si no lo intentamos. ¿Hay puertas que merece la pena dejarlas cerradas? Tal vez sí.
La vida me parece una aventura extraodinaria, de veras que sí. Que nadie te diga qué debes hacer con tu vida, es tuya. Haz lo que quieras hacer. A lo largo de mi carrera me he encontrado infinidad de puertas cerradas, y algunas que lo han hecho en mi propia cara. No nos tomemos todo a la tremenda. Quién sabe si dentro de unos años un golpe de viento no las abrirá de par en par.
No hay tiempo perdido, ni tiempo que perder.
Gracias a todas aquellas personas que me abren las puertas de su casa y de sus vidas. Se está de lujo ahí dentro.
Aquí les muestro mis filias y mis fobias:
En Spotify: https://open.spotify.com/album/1DM29meUMXVbfo8VqKxAjm
En Tidal:
http://tidal.com/album/50348478