¿Qué tipo de gestos te tocan el alma? ¿Por qué razones?
Me encanta ver la gente que comprueba. Que acepta. Que no juzga y trata de entender por qué alguien decidió adaptar eso a su vida. Y hacerlo también su felicidad. Después de todo, de eso se trata el verdadero cariño desinteresado.
También me gusta mucho cuando me escuchan. Y cuando me permiten escuchar. Cuando no hay celulares, y existe el deseo de guardar recuerdos valiosos con lo natural de cada uno. Sin actos baratos. Siendo tú mismo.
Cuando confían. Es algo precioso. No me gusta dudar del resto. Es decir, ¿como voy a dudar de alguien tan imperfecto como yo que a fin de cuenta va tras por lo mismo que yo voy, que es la felicidad, paz mental, convicción de lo que cada uno es realmente y desea ser y hacer en la vida? Quiero escuchar historias. Miedos. Formas de superarlo. Me gusta confiar e intentar entender.
Me gusta la comunicación. No buscar culpables. Expresar que es lo que sientes. Entender que nunca sabes todo el panorama. Si, creo que lo anterior forma parte de la clave para encontrar la felicidad.
Me gustan cuando te consideran antes que se consideren a si mismo. No es que busco atención, pero considero agradable cuando se toma la iniciativa de tomar en cuenta que es lo que a la otra persona le gustaría recibir y que no. Si se logra, terminará siendo mutuo. Y no para ser radicales, obviamente el otro no se descuidará a sí mismo por el otro. Todo se basa en pensar en el resto saludablemente.
Me gusta reír. Siento que es un gesto hermoso. Me gustaría estar rodeados de personas que lo hagan más a menudo pero teniendo presente motivos valiosos de por medio, no cualquier cosa.
Hablando ya de gestos físicos, me gustan los abrazos. Mi mamá y yo siempre estamos abrazados. Creo que es una curación a todo. De lo escasos que están los abrazos, estoy que me pongo un cartel de “abrazos gratis” y me voy a la plaza. ¿Crees que tendré éxito?
(Creo que siempre me desvio del tema. Pero me siento bien. Y ando divagando. Hay tantas cosas en este mundo torcido que te llenan.... Se me hace impresionante)
También me gusta mucho cuando me escuchan. Y cuando me permiten escuchar. Cuando no hay celulares, y existe el deseo de guardar recuerdos valiosos con lo natural de cada uno. Sin actos baratos. Siendo tú mismo.
Cuando confían. Es algo precioso. No me gusta dudar del resto. Es decir, ¿como voy a dudar de alguien tan imperfecto como yo que a fin de cuenta va tras por lo mismo que yo voy, que es la felicidad, paz mental, convicción de lo que cada uno es realmente y desea ser y hacer en la vida? Quiero escuchar historias. Miedos. Formas de superarlo. Me gusta confiar e intentar entender.
Me gusta la comunicación. No buscar culpables. Expresar que es lo que sientes. Entender que nunca sabes todo el panorama. Si, creo que lo anterior forma parte de la clave para encontrar la felicidad.
Me gustan cuando te consideran antes que se consideren a si mismo. No es que busco atención, pero considero agradable cuando se toma la iniciativa de tomar en cuenta que es lo que a la otra persona le gustaría recibir y que no. Si se logra, terminará siendo mutuo. Y no para ser radicales, obviamente el otro no se descuidará a sí mismo por el otro. Todo se basa en pensar en el resto saludablemente.
Me gusta reír. Siento que es un gesto hermoso. Me gustaría estar rodeados de personas que lo hagan más a menudo pero teniendo presente motivos valiosos de por medio, no cualquier cosa.
Hablando ya de gestos físicos, me gustan los abrazos. Mi mamá y yo siempre estamos abrazados. Creo que es una curación a todo. De lo escasos que están los abrazos, estoy que me pongo un cartel de “abrazos gratis” y me voy a la plaza. ¿Crees que tendré éxito?
(Creo que siempre me desvio del tema. Pero me siento bien. Y ando divagando. Hay tantas cosas en este mundo torcido que te llenan.... Se me hace impresionante)