Frase: una con la que no estáis, para nada, de acuerdo.
"Sigue lo que tú corazón te dice".
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Annie Hawke.
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Eres rencoroso?
Me he dado cuenta de que no. Y con ello, el ser olvidadizo favorece bastante. Para ponerme a prueba, si tuvimos un problema el año pasado, por favor, ven y pregúntame al respecto. Quizás tengo un margen de circunstancias pero de detalles, ni hablemos. Y no es que se trate de algo involuntario, es porque decidí a no aferrarme al pasado ni a condenaciones (que dan infelicidad). De alguna manera siento que de esto puedo sacar muchísimas ventajas. No se si llamarlo una cualidad, pero me gusta esto de mí.
¿Consideráis que la gente es objetiva juzgando un trabajo o una idea? ¿Se suele dar la razón a quienes les interesa por otros motivos que no son la calidad?
Se me complica un poco responder. Y es que recientemente he estudiado una verdad fundamental: nuestras opiniones se condimentan con lo que nos rodea. Es decir, es muy fácil dejarnos de alguna manera influenciar por lo que se supone que es lo mejor acorde a lo que nos rodea. Veo poca objetividad en todos lados. Difícilmente encuentro un esfuerzo que deje claro que se puede opinar o definir un mismo concepto de forma diferente. No es que yo sea un guerrero a la hora de determinar el potencial de alguna idea en particular, pero las ideas del mundo están llenas de parcialidad, réplicas de algo que ya existe y que se desea perfeccionar, o miedo indirecto.
¿Creéis que las cosas pierden su efecto cuando las tienes al alcance, en general?
Creo que todo dependería del cuidado que le des, ¿no crees? Es decir; quizás, en mi hogar, hay muchas plantas. Brindan frescura, adorno y una buena vista, y podemos concluir que se me ha concedido un «alcance» genuino. Pero, todos sabemos lo que pasaría si subestimo el cuidado que debo ofrecerle a cada una de las plantas para su conservación. Allí se perdería toda la endémica y efecto si no presto la suficiente atención o voluntad para que la cosa perdure.
En conclusión: todo depende de ti.
En conclusión: todo depende de ti.
¿cómo hacer una crítica certera?
Para ello tendrías que contar con la vista completa de todo el panorama que intentas definir a través de tu argumentación. Creo que nunca estamos totalmente capacitados como para dar una crítica u opinión completa, pues el conocimiento nunca acaba, y resulta en que de una cosa, pasas a otra al momento de fomentar tu investigación personal. Sin embargo, estoy de acuerdo con que toda opinión debe reportar una base sólida que la sustente, tanto como imparcialidad y buen juicio.
Me metí en esta cuenta por pura curiosidad y vi algunas preguntas tuyas de hace años. Me dió nostalgia, tengo recuerdos contigo, recuerdos que no sabía que permanecían en mi cabeza. Siento que reviví el pasado. Espero que estés muy bien, Tommy, ojalá te estés cuidando mucho.
Buenos recuerdos, ¿huh? Aunque ya te respondí por interno, destacaré esto aquí. Me hiciste pensar en lo bonito que es recordar y quiero tenerlo presente.
¿Tienes pensado volver a Ask? :/
Hola. Esto es de hace siete meses. Y mira, no sabría decirte. Soy súper esporádico e inestable a la hora de decidirme. Lo que sí puedo asegurarte es que ask, sin importar los cambios, tiene como que algo especial que siempre me hará volver así sea durante minutos.
¿Qué te tiene en las nubes?
Cuatro.
Cuatro gloriosos años teniéndote presente, en lo más hondo de mi.
Y qué satisfactorio. Eso, de que seas capaz de reanimar cosas en mí ahora, tal como siempre. Porque lo cierto es que para mi no tienes fin; lo que intento decir es que no desearía que asumieras algo que nunca haya podido bailar al son de lo que nos representa y nos ha hecho hacer y ser. Porque, a pesar de todo, eres mi lugar seguro. Eres donde quiero estar en luz y oscuridad.
Como ya aclaré, ha pasado tiempo, y..., aunque aún así pueda seguir vinculándome tan bien con lo que te demuestra lo majestuoso que es vivir solo cuando te tengo cerca, me lleva a las nubes.
Esto me suena a reflexión de lo mucho que te aprecio.
Cuatro gloriosos años teniéndote presente, en lo más hondo de mi.
Y qué satisfactorio. Eso, de que seas capaz de reanimar cosas en mí ahora, tal como siempre. Porque lo cierto es que para mi no tienes fin; lo que intento decir es que no desearía que asumieras algo que nunca haya podido bailar al son de lo que nos representa y nos ha hecho hacer y ser. Porque, a pesar de todo, eres mi lugar seguro. Eres donde quiero estar en luz y oscuridad.
Como ya aclaré, ha pasado tiempo, y..., aunque aún así pueda seguir vinculándome tan bien con lo que te demuestra lo majestuoso que es vivir solo cuando te tengo cerca, me lleva a las nubes.
Esto me suena a reflexión de lo mucho que te aprecio.
¿Te consideras alguien rencoroso?
No, para nada. ¿Alguna vez has pensado en lo que “el guardar rencor” realmente te ofrece? ¿Creemos, en realidad, que esto trata de una desventaja para todos menos para el que lo siente? Porque, pues, de ser así... ¡cuánta fantasía!
De manera sana me quiero. Y por esa misma razón me esfuerzo por apartar todo lo que amenazaría con quebrantar la felicidad de lo que he ido reuniendo. Porque el resentimiento, por mucho que parezca “necesario”, te amarga, hace que desaproveches, te retraigas y no vuelvas a tu posición inicial al menos que cuentes con razones que te choquen. Y al final de todo, por lo general sino se controla bien, te hace hacer y pensar cosas que más tarde podrían lograr que te sientas arrepentido por haber permitido que sucedieran.
Por otro lado, me gusta reconocer que todos en algún momento hemos provocado algún tipo de injusticia. Sea voluntariamente o lo contrario, puede sucederle a cualquiera por meramente ser humanos. Por consiguiente, no podemos esperar una línea recta cuando somos compuestos torcidos que intentan amoldarse a pesar de esta realidad. Tras tener este punto de vista presente, ¿con qué cara podría condenar a alguien si desde hace mucho tiempo atrás ya yo lo estaba?
No quiero que se malinterprete mi idea. A algunas personas en ocasiones hay que tenerlas lejos. Pero una cosa es eso, y otra es guardar rencor.
De manera sana me quiero. Y por esa misma razón me esfuerzo por apartar todo lo que amenazaría con quebrantar la felicidad de lo que he ido reuniendo. Porque el resentimiento, por mucho que parezca “necesario”, te amarga, hace que desaproveches, te retraigas y no vuelvas a tu posición inicial al menos que cuentes con razones que te choquen. Y al final de todo, por lo general sino se controla bien, te hace hacer y pensar cosas que más tarde podrían lograr que te sientas arrepentido por haber permitido que sucedieran.
Por otro lado, me gusta reconocer que todos en algún momento hemos provocado algún tipo de injusticia. Sea voluntariamente o lo contrario, puede sucederle a cualquiera por meramente ser humanos. Por consiguiente, no podemos esperar una línea recta cuando somos compuestos torcidos que intentan amoldarse a pesar de esta realidad. Tras tener este punto de vista presente, ¿con qué cara podría condenar a alguien si desde hace mucho tiempo atrás ya yo lo estaba?
No quiero que se malinterprete mi idea. A algunas personas en ocasiones hay que tenerlas lejos. Pero una cosa es eso, y otra es guardar rencor.
¿Existen tipos de miedo? ¿Podrías mencionarme alguno de ellos si estás de acuerdo?
Hay uno que me gusta mucho. Tan pronto como pude identificarlo y razonar que es necesario, me sentí mejor en la vida. A ti, ¿alguna vez has tenido miedo por fallarle a alguien? Ya sabes, quieres a alguien, le derramas tu corazón, comparten cosas... Y esos motivos de felicidad crean un miedo protector. Un miedo por fallarle que, te protege de hacer cosas que te perjudiquen y perjudiquen por lo tanto a la otra persona y la entristezcas. Porque por razones es importantísima para ti y por su infelicidad, eres capaz de perderte. Y más si tú la provocas.
Con base puedo decir que existen varios tipos de miedos. Este es uno de ellos, el primero que se me vino a la mente.
Con base puedo decir que existen varios tipos de miedos. Este es uno de ellos, el primero que se me vino a la mente.
¿Qué tipo de gestos te tocan el alma? ¿Por qué razones?
Me encanta ver la gente que comprueba. Que acepta. Que no juzga y trata de entender por qué alguien decidió adaptar eso a su vida. Y hacerlo también su felicidad. Después de todo, de eso se trata el verdadero cariño desinteresado.
También me gusta mucho cuando me escuchan. Y cuando me permiten escuchar. Cuando no hay celulares, y existe el deseo de guardar recuerdos valiosos con lo natural de cada uno. Sin actos baratos. Siendo tú mismo.
Cuando confían. Es algo precioso. No me gusta dudar del resto. Es decir, ¿como voy a dudar de alguien tan imperfecto como yo que a fin de cuenta va tras por lo mismo que yo voy, que es la felicidad, paz mental, convicción de lo que cada uno es realmente y desea ser y hacer en la vida? Quiero escuchar historias. Miedos. Formas de superarlo. Me gusta confiar e intentar entender.
Me gusta la comunicación. No buscar culpables. Expresar que es lo que sientes. Entender que nunca sabes todo el panorama. Si, creo que lo anterior forma parte de la clave para encontrar la felicidad.
Me gustan cuando te consideran antes que se consideren a si mismo. No es que busco atención, pero considero agradable cuando se toma la iniciativa de tomar en cuenta que es lo que a la otra persona le gustaría recibir y que no. Si se logra, terminará siendo mutuo. Y no para ser radicales, obviamente el otro no se descuidará a sí mismo por el otro. Todo se basa en pensar en el resto saludablemente.
Me gusta reír. Siento que es un gesto hermoso. Me gustaría estar rodeados de personas que lo hagan más a menudo pero teniendo presente motivos valiosos de por medio, no cualquier cosa.
Hablando ya de gestos físicos, me gustan los abrazos. Mi mamá y yo siempre estamos abrazados. Creo que es una curación a todo. De lo escasos que están los abrazos, estoy que me pongo un cartel de “abrazos gratis” y me voy a la plaza. ¿Crees que tendré éxito?
(Creo que siempre me desvio del tema. Pero me siento bien. Y ando divagando. Hay tantas cosas en este mundo torcido que te llenan.... Se me hace impresionante)
También me gusta mucho cuando me escuchan. Y cuando me permiten escuchar. Cuando no hay celulares, y existe el deseo de guardar recuerdos valiosos con lo natural de cada uno. Sin actos baratos. Siendo tú mismo.
Cuando confían. Es algo precioso. No me gusta dudar del resto. Es decir, ¿como voy a dudar de alguien tan imperfecto como yo que a fin de cuenta va tras por lo mismo que yo voy, que es la felicidad, paz mental, convicción de lo que cada uno es realmente y desea ser y hacer en la vida? Quiero escuchar historias. Miedos. Formas de superarlo. Me gusta confiar e intentar entender.
Me gusta la comunicación. No buscar culpables. Expresar que es lo que sientes. Entender que nunca sabes todo el panorama. Si, creo que lo anterior forma parte de la clave para encontrar la felicidad.
Me gustan cuando te consideran antes que se consideren a si mismo. No es que busco atención, pero considero agradable cuando se toma la iniciativa de tomar en cuenta que es lo que a la otra persona le gustaría recibir y que no. Si se logra, terminará siendo mutuo. Y no para ser radicales, obviamente el otro no se descuidará a sí mismo por el otro. Todo se basa en pensar en el resto saludablemente.
Me gusta reír. Siento que es un gesto hermoso. Me gustaría estar rodeados de personas que lo hagan más a menudo pero teniendo presente motivos valiosos de por medio, no cualquier cosa.
Hablando ya de gestos físicos, me gustan los abrazos. Mi mamá y yo siempre estamos abrazados. Creo que es una curación a todo. De lo escasos que están los abrazos, estoy que me pongo un cartel de “abrazos gratis” y me voy a la plaza. ¿Crees que tendré éxito?
(Creo que siempre me desvio del tema. Pero me siento bien. Y ando divagando. Hay tantas cosas en este mundo torcido que te llenan.... Se me hace impresionante)