¿Cómo te sientes al mentir? Es decir, ¿te provoca malestar? ¿Satisfacción? ¿Dónde de encuentran físicamente esas emociones? Hasta luego.

Para mí, la mentira no es más que un atajo.
Imagina que vas caminando hacia un sitio, pero las calles están abarrotadas debido a cualquier circunstancia y, por ello, te desplazas a razón de un metro por hora. En un momento dado, ves un estrecho callejón a tu derecha. Decides tomarlo, aunque nunca lo has hecho y no sabes a dónde te llevará. Sales del mismo y resulta que desemboca en el punto al que te dirigías en primer lugar.
Satisfacción no sientes, porque no has obtenido nada extraordinario. Malestar, tampoco, ya que tu situación no ha empeorado, ni has perjudicado a nadie.
Es, exactamente, alivio.
Salir de ese amasijo de cuerpos, del barullo, sus voces, los gritos de los niños pequeños, las personas que vienen en dirección contraria y/o con prisa perturbando por completo la inercia que implica el modo de tránsito automático...
...y, de repente, la quietud. El espacio personal recupera sus constantes vitales. Ni existes tú, ni existen ellos.
Eso es lo que siento cuando miento.
Elevo a la enésima potencia el típico meme emo vomitado por 'Tumblr' en el que alguien dice que está bien cuando, en realidad, está completamente descompuesto, sólo para evitar que le pregunten más.
"¿Vives sólo?" - No, vivo con setecientas personas.
Así, nunca me sugerirá venir a mi casa.
"¿Tienes coche?" - Qué va, ni permiso de conducir tengo.
Así, no me pedirá que le lleve a ningún sitio.
"¿Tienes pareja?" - No tengo ni ganas de vivir.
Así, ni chismorrea, ni se mete en mi vida personal. No tiene dónde hacerlo.
"¿Te fue bien en los exámenes?" - No lo sé, aún no he mirado las notas.
Así, no le contará a su grupito que soy un fracasado y me mirarán o hablarán a través de la pena si suspendo, ni me pedirán ayuda en forma de apuntes, trabajos, o cualquier otra cosa si es que apruebo.
"¿Tienes buen sueldo?" - Depende. Están reestructurando la oficina y, seguramente, habrá cambios.
El truco es ser impreciso. Si no das datos concretos, dejan de preguntar.
Entonces, las emociones producidas por la mentira se transmiten físicamente, en mi caso, a los oídos. Porque hace que todo se calle.
Es una onda expansiva que despeja la vía. Una bomba de humo que me hace invisible y protege mi imperturbabilidad.
Tal y como yo la empleo, es la semilla del silencio.
Imagina que vas caminando hacia un sitio, pero las calles están abarrotadas debido a cualquier circunstancia y, por ello, te desplazas a razón de un metro por hora. En un momento dado, ves un estrecho callejón a tu derecha. Decides tomarlo, aunque nunca lo has hecho y no sabes a dónde te llevará. Sales del mismo y resulta que desemboca en el punto al que te dirigías en primer lugar.
Satisfacción no sientes, porque no has obtenido nada extraordinario. Malestar, tampoco, ya que tu situación no ha empeorado, ni has perjudicado a nadie.
Es, exactamente, alivio.
Salir de ese amasijo de cuerpos, del barullo, sus voces, los gritos de los niños pequeños, las personas que vienen en dirección contraria y/o con prisa perturbando por completo la inercia que implica el modo de tránsito automático...
...y, de repente, la quietud. El espacio personal recupera sus constantes vitales. Ni existes tú, ni existen ellos.
Eso es lo que siento cuando miento.
Elevo a la enésima potencia el típico meme emo vomitado por 'Tumblr' en el que alguien dice que está bien cuando, en realidad, está completamente descompuesto, sólo para evitar que le pregunten más.
"¿Vives sólo?" - No, vivo con setecientas personas.
Así, nunca me sugerirá venir a mi casa.
"¿Tienes coche?" - Qué va, ni permiso de conducir tengo.
Así, no me pedirá que le lleve a ningún sitio.
"¿Tienes pareja?" - No tengo ni ganas de vivir.
Así, ni chismorrea, ni se mete en mi vida personal. No tiene dónde hacerlo.
"¿Te fue bien en los exámenes?" - No lo sé, aún no he mirado las notas.
Así, no le contará a su grupito que soy un fracasado y me mirarán o hablarán a través de la pena si suspendo, ni me pedirán ayuda en forma de apuntes, trabajos, o cualquier otra cosa si es que apruebo.
"¿Tienes buen sueldo?" - Depende. Están reestructurando la oficina y, seguramente, habrá cambios.
El truco es ser impreciso. Si no das datos concretos, dejan de preguntar.
Entonces, las emociones producidas por la mentira se transmiten físicamente, en mi caso, a los oídos. Porque hace que todo se calle.
Es una onda expansiva que despeja la vía. Una bomba de humo que me hace invisible y protege mi imperturbabilidad.
Tal y como yo la empleo, es la semilla del silencio.